Sigue en órbita el "Capitán Beto", el primer nanosatélite desarrollado y fabricado íntegramente en Argentina. "Democratiza" el espacio, según opinan los científicos.
Se trata de un satélite de observación de apenas dos kilos, de 20 centímetros de altura por 10 centímetros de lado. Fue fabricado en Bariloche (Río Negro) por la empresa Satellogic, e incubada por Invap, en el marco de un respaldo nacional a emprendimientos innovadores.
“Capitan Beto” fue y es financiado íntegramente por el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva de la Nación, que desembolsó unos 6 millones de pesos en el proyecto.
Despegue
El lanzamiento desde China fue seguido paso a paso desde el Radio Club Bariloche, en donde radio operadores, científicos y técnicos comandaron la misión desde con sus notebooks, módems y transmisores.
El líder de la misión, Emiliano Kargieman, su colega Gerardo Richarte y Eduardo Ibáñez, ingenieros de Invap, encabezaron las operaciones y siguieron con atención los reportes de distintos puntos del mundo que registraban el paso del satélite.
Series de números, gráficos de frecuencia y un sonido como el de las viejas conexiones "dial up" a internet, son las señales de vida del "Capitán Beto", debidamente decodificadas por sus operadores, que en la medida que pueden las traducen en posteos en Twitter (@cubebug1) o en la página de la misión http://1.cubebug.org/
Adoradores del rock nacional, bautizaron al satélite en homenaje al Flaco Spinetta y su legendaria canción.
Democratizar el espacio
Kargieman indicó que la idea de desarrollar y fabricar nanosatélites busca "democratizar el espacio", hasta ahora reservado primordialmente a gobiernos y economías fuertes que pueden costear esta industria tan cara. "Uno de estos nanosatélites cuesta menos de 50.000 dólares, y está al alcance de mucha gente, de universidades, pymes, o personas que quieran tenerlo para aprovechar su potencial", afirmó.
Este satélite lleva tres equipos de estudio del propio aparato: una rueda de inercia (para controlar su actuación en el espacio), un startracker (saca fotos para establecer su posición) y una computadora para vigilar su navegación.
También tienen listo el próximo nanosatélite, que en virtud de su aprecio por la argentinidad y sus íconos se llama "Manolito", en homenaje a Quino, Mafalda y los demás personajes de la historieta, y su lanzamiento está previsto para hacerse desde Rusia.